Los científicos, analizando datos de la sonda Voyager 2 de la NASA, han observado que la burbuja de viento solar que rodea al Sistema Solar no es circular, sino que tiene una forma aplastada, de acuerdo a los recientes datos publicados como parte de una serie de documentos en la revista ‘Nature’ del 3 de julio.
El comienzo de la zona de transición entre la heliosfera (la burbuja de viento solar) y el resto del espacio interestelar es conocido como el “termination shock”. Los científicos informan de que la Voyager 2 cruzó este límite más cerca del Sol de lo que se esperaba, sugiriendo que la heliosfera en esta región está presionada hacia el interior, más cercana al Sol por tanto, debido a un campo magnético interestelar. Estas conclusiones ayudan a forjar una imagen de cómo el Sol interactúa con el medio interestelar que le rodea.
Lanzadas en 1977, las dos Voyager fueron originariamente enviadas para sobrevolar y observar Júpiter y Saturno. La trayectoria de vuelo de la Voyager 1 se curvó y se alejó de la eclíptica, el plano en el que la mayoría de los planetas orbitan el Sol. La trayectoria de la Voyager 2 continuó en la eclíptica, permitiendo a la sonda dos encuentros planetarios más, con los distantes planetas Urano y Neptuno. Las Voyager son los objetos hechos por el hombre que se encuentran más alejados en el espacio, encontrándose la Voyager 1 más distante que la Voyager 2.
La actual misión de la Voyager 2, y la de su hermana la Voyager 1, es alcanzar el borde del espacio interestelar.
Fuente: http://www.sondasespaciales.com/index.php?option=com_frontpage&Itemid=1
sábado, 5 de julio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario